1. JARANDILLA DE LA VERA, Cáceres. Vista del castillo por su lateral.
2. JARANDILLA DE LA VERA, Cáceres. Fachada y puerta principal del castillo.
3. JARANDILLA DE LA VERA, Cáceres. Patio central del castillo.
4. JARANDILLA DE LA VERA, Cáceres. En el patio central del castillo, hacia la portada principal.
5. JARANDILLA DE LA VERA, Cáceres. En el patio central del castillo.
6. JARANDILLA DE LA VERA, Cáceres. Detalle del estanque del patio central del castillo.
7. JARANDILLA DE LA VERA, Cáceres. Igl. de Ntra. Sra. de la Torre.
8. JARANDILLA DE LA VERA, Cáceres. Igl. de San Agustín.
JARANDILLA DE LA VERA (I), provincia de Cáceres: 23 de febrero de 2013.
Residencia temporal del emperador Carlos V, que se hospedó en el castillo en tanto finalizaban las obras de sus aposentos en Yuste, es una de las poblaciones de La Vera que mayor desarrollo ha experimentado en los últimos años. Ello ha afectado a la arquitectura tradicional, sustituida en gran parte por nuevas edificaciones.
Las numerosas reformas realizadas en el castillo, actual Parador, y de manera especial la última, en 1960, han modificado su estructura con la incorporación de nuevos pabellones que alteran los viejos sistemas defensivos. Restos del primer recinto de fortificaciones son el foso, los torreones cilíndricos y la puerta de acceso con arco apuntado. El patio central es el elemento más interesante. Consta de dos galerías de arcos en un lateral y torres prismáticas y cilíndricas en los ángulos.
En la Plaza Mayor o de la Constitución, adornada con una refrescante fuente de granito, se levanta la construcción religiosa más interesante de Jarandilla. La iglesia de Nuestra Señora de la Torre (s. XIV) se edifica sobre un antiguo castillo medieval aprovechando la torre del homenaje como campanario. De original estructura, aparece al exterior con un ábside falso a los pies, en tanto que el de la cabecera, poligonal en el interior, presenta forma semicircular en su parte externa. El edificio se inscribe en el estilo gótico, a excepción de la cubierta de la nave, reconstruida a mediados del presente siglo. En el interior conserva un retablo del siglo XVII y un Cristo de marfil del XVI,
Desde la plaza por la calle Machín se llega a la ermita de Sopetrán, con un magnífico retablo barroco, la picota octogonal rematada por cuatro cabezas de dragón y una bella cúpula en forma de pináculo floreado.
Otros lugares de interés son la renacentista iglesia de San Agustín, junto al Parador, y la ermita del Cristo del Humilladero, al comienzo de la ctra. a Navalmoral de la Mata. Bajando apenas un kilómetro por la calle Antonio Serrano (frente al Parador), se llega al bello enclave natural de la garganta Jaranda y el puente Parral. De traza medieval y origen romano, este puente atraviesa las frías aguas de la garganta, rematadas bajo su arco formando una amplia piscina natural.
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