13. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. Plaza de España.
14. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. Fuente de los Cuatro Caños.
15. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. Remate de la fuente de los Cuatro Caños.
16. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. En la plaza del Rollo-Picota.
17. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. En otra perspectiva de la plaza del Rollo-Picota.
18. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. El castillo y la igl. de Sta. Mª de Fuentes Claras.
19. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. Torre del Homenaje del castillo.
20. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. Portada de la igl. de Sta. Mª de Fuentes Claras.
21. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. Ventana y torre de la igl. de Sta. Mª de Fuentes Claras.
22. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. Primera sala del Museo del Empalao.
23. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. Otra de las salas del Museo del Empalao.
24. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. En la sala principal del Museo del Empalao.
25. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. Recreación del Empalao y del Cirineo, en el Museo del Empalao.
26. VALVERDE DE LA VERA, Cáceres. Otra de las salas del Museo del Empalao.
VALVERDE DE LA VERA* (II), provincia de Cáceres: 23 de febrero de 2013.
El paseo por las calles angostas y las irregulares plazuelas, pavimentadas de piedra y surcadas por corrientes de agua que se canalizan en superficie, es insustituibles si se quiere apreciar debidamente la belleza del lugar, que no proviene de edificios singulares sino del conjunto*.
La plaza de España, auténtico "mentidero de la villa" en torno al Ayuntamiento, la de la Fuente de los Cuatro Caños, la de la Iglesia, y la plaza del Rollo-Picota, son los cuatro espacios fundamentales en los que se pueden admirar las bellas y modestas casas de dos plantas, con secadero y balcón de madera, algunas con soportales, que resumen la sabiduría constructiva de sus anónimos arquitectos.
El castillo levantado en el siglo XIV por Nuño Pérez de Monroy y reformado en el siglo XV por los nuevos señores de la villa, los Zúñiga, y la iglesia de Santa María de Fuentes Claras, que se edifica adosada al anterior y aprovechando parte de sus torres y muros, son las construcciones monumentales más destacadas. El interior del templo cobija interesantes sepulcros de la nobleza, retablos y tallas.
Un lugar muy recomendable es el Museo del Empalao. Las tortuosas y empinadas calles de Valverde son escenario, en la medianoche del Jueves Santo, de la impresionante procesión de los Empalaos*. La tradición es muy antigua, ya que existen testimonios documentales que hablan de la existencia de una cofradía de casi 200 hermanos en el año 1600. Los hombres que por promesa deciden recorrer el Camino del Calvario, guiados por un "cirineo" que porta el farol, llevan amarrado sobre los brazos en cruz un timón de arado. Una soga de esparto envuelve fuertemente el pecho hasta la cintura. El atavío se completa con unas enaguas blancas y la gasa que cubre el rostro. Dos espadas cruzadas sobre la nuca y una corona de espinas en la frente acentúan el dramatismo de un rito, que pese a las inevitables desvirtuaciones que conlleva la masiva afluencia turística, resulta sobrecogedor.
Enlace a la Entrada anterior de Valverde de la Vera*:
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