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lunes, 7 de junio de 2021

3369. SEVILLA** (MCDXCII), capital: 22 de febrero de 2020

























SEVILLA** (MCDXCII), capital de la provincia y de la comunidad: 22 de febrero de 2020.
   Mostramos imágenes del Hospital de las Cinco Llagas o de la Sangre (actual sede del Parlamento de Andalucía), que fue fundado por doña Catalina de Ribera. Su primer establecimiento fueron unas casas propias situadas en la calle Santiago, obteniendo para ello, del Papa Alejandro VI, Bula fechada el 13 de mayo de 1500. Será el primer Marqués de Tarifa, quien de el impulso definitivo a la fundación hospitalaria. Tras su muerte, acaecida en 1539, dispuso que se realizara un nuevo hospital con mayor prestancia. Concretamente fue en el entonces arrabal de la Macarena donde se empezó a construir el que iba a ser uno de los edificios más significativos de la arquitectura española del siglo XVI. El Hospital fue dedicado a la curación de mujeres, denominándose de las Cinco Llagas.
   Para elegir la traza que debía seguirse en el nuevo inmueble, los patronos enviaron al arquitecto de la Iglesia y Obispado de Cádiz, Francisco Rodríguez Cumplido, a Toledo, Santiago y Lisboa, con el fin de estudiar y copiar las plantas de sus hospitales. A la vez que dicho maestro presentaba sus diseños, lo hacían los arquitectos Luis de Villafranca, Luis de Vega y Martín de Gainza. No lo suficientemente satisfechos con los proyectos presentados, llamaron también a otros ilustres maestros como Pedro Machuca, Hernán Ruiz el Joven y Gaspar de Vega, además de los sevillanos Diego Hernández, Benito de Mora y Juan Sánchez.
   Definitivamente fue Gainza quien ganó el concurso. Se comenzaron a abrir las zanjas el día 25 de marzo de 1546, colocándose la primera piedra el 12 de mayo. Bajo la dirección de Martín de Gainza, autor del proyecto, se ejecutaron las fachadas sur y oeste, ésta última hasta la altura de las cornisas, con algunas de las naves y patios situadas tras ellas, la torre del ángulo suroeste y el arranque de la torre noroeste. Estas labores fueron realizadas entre 1545 y 1556.
   El 17 de junio de 1558, es nombrado maestro mayor, Hernán Ruiz el Joven, quién permanecerá al frente de las obras hasta 1569. Se encarga entonces de completar el ala de poniente del hospital, sobre todo, en lo que se refiere a cubiertas, así como la culminación de la torre noroeste. Pero, sin lugar a dudas, su labor más significativa será la traza y ejecución de la iglesia, diseñada en 1558, debiéndose a él su disposición exenta.
   Entre 1569 y 1584, fue el hermano de Hernán Ruiz, Francisco Sánchez, el director de la obra, atribuyéndosele los sectores más septentrionales del inmueble.
   En 1590, se requirió a varios arquitectos a fin de tratar sobre el modo más conveniente de cubrir la iglesia, cuestión que fue resuelta acometiéndose su labor, si bien se adoptó el sistema abovedado en detrimento del artesonado en principio proyectado. Entre 1615 y 1617, se acometió la construcción de la portada principal del edificio, con las trazas dadas por Miguel de Zumárraga, así como las buhardillas y dependencias de la fachada principal.
   Ya en el siglo XIX, concretamente en 1808, el hospital fue ocupado por los militares. En 1837, tras la centralización de los hospitales, sirvió como almacén de obras de arte que iba aglutinando la Junta Municipal de Beneficencia, creada por R.O. de 13 de Octubre de 1836.
   Desde marzo de 1972, el inmueble pasó a depender de la Excma. Diputación Provincial de Sevilla, iniciándose en octubre de 1982, el expediente de cesión gratuita a la Junta de Andalucía. Actualmente, la parte del edificio rehabilitada, es sede del Parlamento de Andalucía.
    El Hospital de las Cinco Llagas responde originalmente al estilo renacentista. En planta, sigue la disposición de los centros hospitalarios del momento, si bien mantiene una estrecha relación y dependencia respecto al Hospital Mayor de Milán. Pero quizás sea la iglesia, considerada como una de las obras maestras del manierismo español, la estructura que mayor innovación ofrece en el inmueble. Su particularidad reside en situarla el arquitecto exenta del resto del edificio.
   El antiguo Hospital de las Cinco Llagas o de la Sangre se encuentra situado extramuros de la ciudad, en el extremo norte, frente a la puerta y murallas de la Macarena. Forma parte de una gran manzana flanqueada por las calles Don Fabrique, San Juan de Ribera y la calle Parlamento al frente, esta última llamada anteriormente Andueza.
   Nos encontramos ante uno de los mayores hospitales construidos en el siglo XVI en Europa. Es un edificio que siguiendo las características del Renacimiento tiende a la horizontalidad formando, en origen, un cuadrado con simetría perfecta y con subdivisiones internas en torno a patios, dejando la iglesia en el patio central.
   El proyecto original del hospital planteaba la construcción de cuatro fachadas y sus respectivas torres en los ángulos. Sin embargo no pudo culminarse el edificio y sólo se terminaron las fachadas Oeste y del mediodía, y se remataron las torres Noroeste y Suroeste.
   Recientemente se ha concluido la torre Sureste y parte de la fachada de levante, además de colocarse en el atrio dos fuentes de mármol que con anterioridad se encontraban en los patios interiores. 
  El edificio presenta dos pisos en altura, articuladas las fachadas por medio de pilastras y columnas. En el piso bajo, sobre un plinto corrido, se alzan pilastras toscanas cajeadas, entre las que se abren pequeñas ventanas rematadas por frontones triangulares. En el cuerpo superior aparecen columnas jónicas, surgiendo entre ellas interesantísimos balcones flanqueados por balaustres de orden jónico, rematados en frontones triangulares coronados con acróteras. Estos balcones se pueden considerar como ventanas ya que el nivel del suelo en el interior, es más bajo, y no se corresponde al del exterior. Los distintos módulos culminan en gárgolas y sobre la portada principal se abren dos buhardillas con vano adintelado con orejetas, flanqueado por pilastras rematadas en ménsulas y un frontón curvo que contiene en su interior otro recto, quedando rotos ambos por una especie de ménsulas.
   Al exterior el edificio presenta una sola portada que se abre en la fachada Sur que da a la antigua calle Andueza hoy Parlamento. Construida en mármol blanco, ofrece dos cuerpos en altura. El primero se estructura en torno a un vano adintelado, flanqueado por columnas toscanas pareadas con fuste estriado, que apoyan sobre pedestales. Entre aquellas figura una hornacina y sobre el dintel una lápida con la una inscripción en latín, que traducida dice "Doña Catalina de Ribera, y don Fadrique Henríquez de Ribera, Marqués de Tarifa, Adelantado del Andalucía, con no menor gusto que piedad mandaron hacer este amplísimo Hospital para curar pobres, intitulado de las Cinco Llagas de JesuChristo; y los Reverendísimos Patronos y Administradores de su hacienda, para más perfecta memoria de tan grandes Príncipes, hicieron esta puerta en el año de 1617". Sobre una cornisa volada, se alza el segundo cuerpo, el cual presenta balcón abalaustrado con vano adintelado entre columnas jónicas, flanqueadas por pilastras rematadas en ménsulas y dos escudos laterales. Sirve de remate un frontón, en cuyo centro presenta volutas y el escudo de armas de la casa de los fundadores entre ángeles tenantes. Culmina la portada en una cruz de cerrajería.
   En cuanto a las torres, la del ángulo Suroeste ofrece tres cuerpos en altura. Los dos primeros similares al resto de la fachada, presentando el último un vano geminado de medio punto, en el que se aprecian motivos ornamentales de filiación serliana, flanqueado por balaustres y rematado por chapitel piramidal con aplique de azulejos polícromos recientemente renovados. En la torre Noroeste, la compartimentación es la misma con registros cuadrados y rectangulares a ambos lados del balcón. Aquí el chapitel aún presenta los azulejos polícromos originales. En ambas torres aparece una balaustrada en alto relieve, que parece demostrar que originalmente el hospital presentaba dicho elemento en sus fachadas. En la restauración efectuada en 1991, se incorporó de nuevo dicha balaustrada.
   El hospital fue concebido como un gran rectángulo con cuatro torres cuadradas en los ángulos, distinguiéndose en el conjunto dos partes esenciales: la crujía de fachada con sus patios anexos y las salas de enfermos que al cruzarse determinaban la presencia de seis patios, en uno de los cuales, en conexión con el patio abierto tras la galería de acceso, se incluyó la iglesia. Actualmente subsisten las salas de enfermos, rectangulares y muy alargadas, y los siguientes patios. Adosados a la crujía de fachada se localizan, en el ala oeste, dos patios, uno de planta rectangular y tres galerías (patio A) y un segundo de planta cuadrada (patio B). En el ala Este se ubican otros dos patios, uno cuadrado con fuente al centro (patio C) y otro con disposición rectangular y sólo tres galerías (patio D). Estos espacios abiertos poseen como elementos de soporte, columnas de mármol portugués que sostienen galerías de arcos de medio punto, en planta baja, y rebajados en la planta alta. Los arcos quedan enmarcados por alfices. Las cubiertas son de sencilla viguería de ladrillo por tabla. Tras la galería de acceso al hospital, se abre un espacio porticado que al incorporar la iglesia, adopta una planta irregular en la que se yuxtaponen dos rectángulos (patio E). En él, las galerías son de arcos de medio punto sobre columnas toscanas pareadas que en sus ángulos apoyan en ménsulas con elementos figurativos. Los arcos quedan enmarcados por alfices. Este mismo tipo de soporte se repite en el piso alto, como acceso a los salones principales del inmueble, siendo los arcos rebajados. Las cubiertas de estas galerías son de viguería con ladrillo por tabla. Como acceso a la segunda planta, se localiza en el lado Oeste de este patio, la escalera, la cual se cubre con un alfarje de madera ochavado.
   A izquierda y derecha de la iglesia, se localizan dos patios (patios F y G) con disposición cuadrada, si bien el segundo tan solo posee dos galerías. Al patio occidental se accede a través de una portada de ladrillo, con vano rebajado, sobre la que aparece un crucifijo y los escudos de los fundadores del edificio. En el ángulo Noroeste del edificio existe otro patio de planta cuadrada (patio H) y tras la iglesia, una vez cruzado el espacio de las dependencias de la biblioteca, se ubica el último patio conservado de planta rectangular (patio I). Estos patios presentan como soportes pilares de ladrillo, sobre los que voltean arcos de medio punto, tanto en planta alta como baja. Sus cubiertas, al igual que el resto de los patios son sencillas viguerías de ladrillo por tabla.
   Alrededor de los distintos patios del inmueble se distribuyen las distintas dependencias. Las correspondientes a las crujías de fachadas, tanto en el piso alto como bajo, presentan plantas cuadradas y rectangulares, habiendo sido habilitadas para oficinas administrativas y sedes de los distintos partidos políticos, careciendo estos espacios de interés artístico. Respecto a las salas de enfermos, éstas conservan su disposición original, a modo de grandes naves alargadas y rectangulares, con cubierta de viguería de ladrillo por tabla, que en los cruces determinan dos espacios cuadrados. Actualmente se usa como biblioteca y unida a ella se localizan los despachos administrativos del servicio bibliotecario que ofrece como cubrición bóveda de cañón con lunetos.
   En los cruces de las antiguas salas de enfermos existen dos interesantes bóvedas, la oriental con yeserías planas de tipo geométrico o cartones recortados, y la occidental sobre arcos escarzanos, de cantería y círculos concéntricos. Sobre estas naves se localizan tres espadañas. Calderón Quijano analiza la situada en la nave oriental, que denomina como Clínica de la Esperanza, la cual presenta un arco de medio punto que remata en frontón ondulado, en cuyo centro aparece un círculo, culminando en una veleta y cruz de hierro forjado. Conserva cuatro mechinales que inducen a pensar en la posible existencia de una celosía. Similar a esta espadaña es la de la nave occidental, aunque no remata en cruz y veleta. Existe otra que da al patio F, que el citado autor denomina como patio del Cardenal. Es de un solo cuerpo y ofrece una triple arquería de vanos de medio punto. Sobre ella, un frontón curvo ondulado, roto al centro, de donde emerge un piñón con la fecha en un círculo de "1912", probablemente la de una de sus restauraciones.
   Como ya se indicó, en el patio ubicado tras la galería de acceso al hospital, se ubica la iglesia, la cual rompe con la tradición constructiva hospitalaria, al disponerse exenta del resto del edificio. Su planta es de cruz latina, con una sola nave de dos tramos y pequeñas capillas laterales rectangulares. El crucero posee brazos poco desarrollados, siendo la capilla mayor de planta semicircular. La sacristía ubicada tras el altar mayor presenta planta rectangular. Entre la iglesia y la sacristía, se ubica una escalera de caracol que sirve de acceso a la azotea del edificio y comunica con la cripta. Respecto a los soportes del templo, aparte de sus propios muros, es importante señalar los capiteles-péndolas, sobre los que se asientan potentes columnas jónicas adosadas que sirven de soporte a los arcos fajones y formeros que sostienen las distintas bóvedas. En cuanto a las cubiertas interiores, presenta bóvedas vaídas en la nave y crucero, y bóveda de horno o cuarto de esfera en el presbiterio. La sacristía, por su parte, ofrece bóvedas de arista, con casetones y motivos geométricos.
   La iglesia presenta tres portadas: la principal y dos laterales, en el lado del Evangelio y la Epístola, respectivamente. La portada principal, situada a los pies de la iglesia, está concebida a modo de arco triunfal, con dos cuerpos y frontón triangular como remate. El cuerpo inferior es dórico, presentando arco de medio punto con ménsula en la clave, flanqueado por dobles columnas dóricas que se elevan sobre podium y sustentan un entablamento con triglifos. En las enjutas y clave del arco, se sitúan tres relieves con la representación de las virtudes teologales: Fe, Esperanza y Caridad, realizados en 1564 por Juan Bautista Vázquez el Viejo. El segundo cuerpo, ofrece hornacinas entre columnas jónicas pareadas, que flanquean un arco de medio punto con ménsula en la clave, sobre el que se sitúan los escudos de los patronos y la inscripción alusiva a Santo Tomás y al título del Hospital: "QVIA VIDISTI ME THOMA/ CREDIDISTI BEATI QVI NON/ VIDERUNT ET CREDIDERVNT". En las enjutas puede leerse la inscripción "AÑO 1567". Un entablamento abombado de filiación serliana da paso a un frontón triangular que culmina en acróteras en forma de jarrón. Destaca en la portada, el cuidado diseño, así como la ornamentación geométrica de los intercolumnios y jambas.
   Las portadas laterales, abiertas en el crucero, ofrecen un esquema similar a la principal aunque su diseño es más sencillo. Presentan arcos de medio punto con ménsula en la clave, flanqueado por columnas jónicas sobre pedestales, con hornacina central entre registros ovalados. Sobre el arco de ingreso presentan un friso decorativo con jarrones sobre las columnas y una hornacina avenerada como remate. En cuanto a las fachadas del templo hospitalario, hay que decir que la fachada de los pies presenta a ambos lados de la portada, dos módulos salientes articulados por pilastras dóricas, jónicas y corintias, entre las que se abren varias ventanas y óculos, ofreciendo el último cuerpo sillares almohadillados, y sobre la portada una ventana de iluminación a la iglesia. Las fachadas laterales ofrecen la misma articulación, rematando en ventanas termales palladianas. La fachada de la cabecera remata en una espadaña de piedra, con arco adovelado de medio punto, pilastras adosadas en las jambas y frontón recto como remate. En su interior existe una campana con la inscripción, no legible totalmente: "SOLANO ME FECIT. AÑO 1714". Remata la fachada de la iglesia en especie de pirámides rematadas en bolas.
El retablo mayor está compuesto por un banco, tres cuerpos, distribuidos en cinco calles, y un ático; fue diseñado por Asencio de Maeda en 1691, y ejecutado por Diego López Bueno. Su hornacina central la ocupa la escultura de la Virgen con el Niño fechable en el segundo tercio del siglo XVI, y el resto de los registros llevan pinturas realizadas por Alonso Vázquez. En el banco se sitúan los padres de la Iglesia y los Evangelistas, figurando en las calles, San Sebastián, San Roque, San Francisco, la Incredulidad de Santo Tomás, San Antonio de Padua, San Juan Bautista, San José y el Calvario. En el ático aparece un escudo con las Cinco Llagas y dos pinturas de virtudes.
   En la actualidad el templo sirve de Sala de Plenos del Parlamento de Andalucía, institución que ha ocupado el resto de las dependencias hospitalarias tras finalizarse en 2003 la rehabilitación del conjunto. El proceso de las obras estuvo dirigido en su fase inicial por los arquitectos Alfonso Jiménez y Pedro Rodríguez, habiéndose encargado de la fase final los también arquitectos Francisco Torres y Ricardo Aroca
   Respecto a las cubiertas exteriores, todas son de tejas a dos aguas, exceptuando la de la iglesia que es de terraza. El inmueble cuenta con un atrio rectangular, que se desarrolla delante de la fachada principal recorrido en su perímetro y delimitado por rejas de hierro y pilares, en el que se ubican dos fuentes de mármol entre zonas ajardinadas.
   El cierre del hospital se produce en febrero de 1972 debido a su pésimo estado de conservación, aunque se siguen manteniendo algunos servicios sanitarios. El declive fue resultado natural del paso del tiempo y de los avatares históricos y políticos, que lo sumergen en una aguda crisis ya en el siglo XIX, continuada en el siglo XX, donde a pesar de desarrollarse en él los mejores años de la Medicina en Sevilla, la lucha por sus recursos y espacios dejan de lado la necesaria conservación.
   Diez años después de su desalojo, y sin haber sido ajeno a distintos expolios, se inician los pasos para la generosa cesión del edificio a las instituciones autonómicas por parte de la Diputación de Sevilla, su propietaria desde su desamortización en el s. XIX, y en el que realizó una importante asistencia benéfica. En 1986 se elaboran los primeros proyectos y un año más tarde se inician las obras, que concluyen en 1992. El 28 de febrero de ese año el Parlamento de Andalucía estrenó su sede. En esta primera fase se restauraron los patios de Farmacia, de San Carlos, del Recibimiento, del Alcohol y de Cobalto, situados tras la fachada principal. Fue adaptada la iglesia como salón de plenos y las salas de enfermería que la rodean como biblioteca, sala de usos múltiples y salas de comisiones. En total se recuperaron para el Parlamento de Andalucía 48.648 m2 de superficie.
   Durante la V legislatura se ejecutaron diversos trabajos para la rehabilitación de los patios del Cardenal, de la Fuente y de las Flores, que conformaban la superficie del antiguo hospital aún sin restaurar. La intervención arqueológica previa se reveló fundamental para conocer datos históricos y fases de construcción y dejó al descubierto unos interesantes hornos romanos datados hacia la mitad del siglo I d. C., así como elementos de la cultura islámica de gran interés.
   Las obras continuaron a lo largo de la VI legislatura con dos objetivos generales: la ampliación de la superficie del Parlamento de Andalucía y el traslado de la Cámara de Cuentas. Tras el salón de plenos se ubicó la sala de pasos perdidos, dispuesta como centro desde el que establecer las nuevas relaciones del conjunto. Se definieron también los accesos por el lado norte, adecuándolo al urbanismo de este sector de la ciudad.
   Después de tres años de intervenciones y la recuperación de 18.590 m2, la nueva superficie rehabilitada fue inaugurada por sus majestades los reyes el día 20 de febrero de 2003.
Textos de:
Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía.

Enlace a la Entrada anterior de Sevilla**:
3368. SEVILLA** (MCDXCI), capital: 20 de febrero de 2020.

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