2013. MILÁN - MILANO** (I), capital: 20 de agosto de 2015.

1. MILÁN, capital. El Duomo.

2. MILÁN, capital. Una de las puertas de acceso al Duomo.

3. MILÁN, capital. Detalle de la decoración exterior de una de las portadas del Duomo.

4. MILÁN, capital. Interior del Duomo.

5. MILÁN, capital. Una de las capillas del Duomo.

6. MILÁN, capital. Una de las vidrieras del Duomo.

7. MILÁN, capital. Zona absidial y remate del Duomo.

8. MILÁN, capital. Díptico del Tesoro del Duomo.

9. MILÁN, capital. La vía Dante, con el Castello Sforzesco al fondo.

10. MILÁN, capital. La Torre del Filarete del Castello Sforzesco, desde el Largo Cairoli.

MILÁN - MILANO** (I), capital de la provincia y de la región: 20 de agosto de 2015.

   Es la segunda ciudad de Italia en población y el centro económico de la nación, de gran influencia, también, en los ambientes políticos y culturales. Dispone de tres Universidades y un Instituto Politécnico, es la sede de grandes editoriales y de muchos de los periódicos y revistas más difundidos. También presume de tener el teatro lírico más famoso del mundo y se encuentra entre las ciudades europeas que celebran mayor número de exposiciones y congresos, tanto de carácter artístico-cultural como comercial. Su Feria se puso en marcha en el año 1920. Goza de una gran infraestructura hotelera que la convierte en un centro de gran interés turístico.
   En cuanto a su trazado urbanístico, Milán no conserva huellas visibles de la ciudad romana -las murallas de Maximiano pasaban al sur de la plaza Missori y por el centro de la via Manzoni-, pero sin embargo se puede reconocer todavía el típico trazado de callejuelas medievales dentro de la circunvalación más interna, llamada cerchia dei Navigli (círculo de los Canales), en la zona suroeste, entre corso Porta Romana y el Foro Bonaparte. La Milán renacentista estuvo rodeada por otro círculo, el dei bastioni (bastiones), que bordean los actuales Jardines Públicos. En el siglo XIX fue sustituido por bulevares arbolados, al otro lado de los cuales se fue extendiendo la ciudad, durante los años de la unidad italiana. Pero, a pesar de esta rápida expansión, se ha conservado el trazado radial de las avenidas más importantes, con el Duomo en el centro, y el trazado concéntrico de las circunvalaciones y vías de unión, que hoy día llega hasta la gran circunvalación de la autopista.
Monumentos y museos más importantes
   Posee un gran patrimonio monumental, desde la Edad Media hasta el período neoclásico y la época contemporánea, así como un gran número de museos.
Dumo**. Es la catedral gótica más grande y compleja de Italia. Fue iniciada en el año 1386 por Gian Galeazzo Visconti y no se terminó hasta el siglo XIX. Su construcción fue dirigida por diferentes arquitectos entre los que se encontraban: Filippino degli Organi, Guiniforte Solari, G.A. Amadeo, Pellegrini, la familia Buzzi y otros. La fachada, que en gran parte se ha construido según el diseño que hizo Pellegrini en el año 1567, fue levantada durante la época napoleónica y presenta, en su parte superior, los característicos pináculos góticos, mientras que la parte absidal, la más interesante desde el punto de vista arquitectónico, que está constituida por tres enormes ventanales recorridos por nervaduras, se remonta al siglo XIV. Las cinco portadas, construidas en el siglo XVI, tienen puertas modernas de bronce, realizadas, de izquierda a derecha , por A. Minervi, G. Castiglione, L. Poliaghi, F. Lombardi y L. Minguzzi, respectivamente. Los laterales y el ábside están decorados por más de 2.300 estatuas realizadas entre los siglos XIV y XIX; tiene 135 agujas; el mármol que recubre el edificio procede de Candoglia. Respecto a su espacio, tiene una longitud de 157 m y ocupa una superficie de 11.700 m2. Su altura máxima es de 108,50 m en la aguja de la Madonnina, estatua de la Virgen realizada en cobre dorado en 1769.
Interior, de cinco naves, es imponente por la verticalidad de sus 52 colosales pilares, que soportan arcos ojivales y por los efectos luminosos de las grandes vidrieras* policromadas, realizadas desde el siglo XV hasta nuestros días. En la nave derecha se encuentra el sarcófago del arzobispo Ariberto da Intimiano, rematado por un Crucificado del XI. En el brazo derecho del transepto se encuentra la tumba de Gian Giacomo Medici*, realizada por L. Leoni en 1563.
   En el presbiterio, construido por Pellegrini a finales del siglo XVI, destaca el altar mayor coronado por un baldaquino de bronce dorado y un magnífico coro realizado en el siglo XVI. Bajo el altar mayor se encuentra la cripta, realizada por Pellegrini, la cámara sepulcral de san Carlos Borromeo, una urna de cristal construida por F.M. Richini en el año 1606, en la que se encuentra la tumba del santo; en las dependencias contiguas se exhibe el Tesoro*, con valiosas obras de orfebrería. Alrededor del presbiterio corre el deambulatorio, iluminado por los tres ventanales absidales, en el que se puede ver la suntuosa portada de la sacristía septentrional, realizada por Giacomo da Campione a finales del siglo XIV. En el brazo izquierdo del transepto hay un candelabro de bronce, denominado candelabro Trivulzio y realizado en el siglo XIII.
   Bajo la catedral se han descubierto diversos restos arquitectónicos, unos de época romana y otros del Baptisterio de San Juan de las Fuentes y de la Basílica de Santa Tecla, ambos paleocristianos del siglo IV. En la parte exterior del brazo izquierdo del transepto hay una escalera y un ascensor por los que se puede subir al tejado, desde donde se disfruta de un magnífico panorama* de los pináculos y de toda la ciudad.
Castello Sforzesco**. Es el principal monumento civil del Renacimiento milanés. Su construcción, realizada sobre un edificio del siglo XIV, fue iniciada en el año 1450 por Francesco Sforza; Galeazzo María Sforza y Ludovico el Moro completaron su decoración. Durante la ocupación napoleónica se construyó el Foro Bonaparte, avenida que describe un amplio semicírculo alrededor del castillo; fue a comienzos del siglo XX cuando se llevó a cabo una importante tarea de reconstrucción y restauración del edificio.
   La planta del castillo es un amplio cuadrado de 200 m  de lado, rodeado de por un foso, fortificado con poderosas torres en sus vértices y con bastiones adosados a la muralla. En el centro de la fachada se encuentra la reconstruida torre del Filarete, bajo la cual se encuentra la entrada principal.