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sábado, 18 de marzo de 2017

1826. VERSAILLES** (I), capital: 17 de agosto de 2014.

1. VERSAILLES, capital. En la entrada al Palacio.

2. VERSAILLES, capital. El Palacio.

3. VERSAILLES, capital. En el patio de Mármol del Palacio.

4. VERSAILLES, capital. La chapelle de Saint-Louis, en el Palacio.

5. VERSAILLES, capital. Parte superior de la chapelle de Saint-Louis, en el Palacio.

6. VERSAILLES, capital. Exterior de la chapelle de Saint-Louis, en el Palacio.

7. VERSAILLES, capital. En la galerie des Batailles del Musée de l'Histoire de France, en el Palacio.

8. VERSAILLES, capital. Ante "La Coronación de Napoleón" en el Palacio.

9. VERSAILLES, capital. Maqueta de la Opéra del palacio.

10. VERSAILLES, capital. Una de las salas que componen el Gran Apartamento del Palacio.

11. VERSAILLES, capital. El salon d'Hercule en el Palacio.

12. VERSAILLES, capital. El salon de la Guerre, en el Palacio.

13. VERSAILLES, capital. La galerie des Glaces del Palacio.

14. VERSAILLES, capital. En la galerie des Glaces, junto al salon de la Guerre.

15. VERSAILLES, capital. Uno de los dormitorios reales del Palacio.

16. VERSAILLES, capital. El Appartament du roi Luis XIV, del Palacio.

17. VERSAILLES, capital. Otra de las habitaciones del Gran Apartamento del Palacio.

18. VERSAILLES, capital. Los jardines con el Palacio al fondo.

19. VERSAILLES, capital. Ante uno de los estanques y el Palacio al fondo.

20. VERSAILLES, capital. Ante otro de los estanques con el Palacio de fondo.

21. VERSAILLES, capital. Ante la inmensidad de los jardines del Palacio.

22. VERSAILLES, capital. El Grand Canal de los jardines del Palacio.

23. VERSAILLES, capital. El basin d'Apollon en los jardines del Palacio.

24. VERSAILLES, capital. El basin d'Apollon durante el espectáculo de agua y sonido, en los jardines del Palacio.

25. VERSAILLES, capital. Otra de las innumerables fuentes de los jardines del Palacio.

26. VERSAILLES, capital. Otra fuente más de los jardines del Palacio.

27. VERSAILLES, capital. Ante una de las grutas de los jardines del Palacio.

VERSAILLES** (I), capital del departamento: 17 de agosto de 2014.
   Esta famosa ciudad era un pueblo en medio de un inmenso bosque que servía de cazadero real antes de la llegada de Luis XIV. En un valle agreste, entre estanques malolientes, al precio de grandes trabajos de saneamiento y desmonte, se contruyó uno de los palacios mayores y más famosos del mundo.
   El pequeño pueblo se fue ampliando en función de la residencia real, y en pocos decenios se transformó en una joya urbanística y arquitectónica, con las Grandes y las Peties Ecuries, construidas por Jules Hardouin-Mansart, que separan los barrios de St-Louis y Notre-Dame. Este último se distribuye alrededor de la rue de la Paroisse y del Gran mercado del siglo XIX que da al passage des Deux-Portes. En este pasaje, en la antigua prisión, se han establecido los anticuarios. No muy lejos está el Musée Lambiret. Hacia el barrio de St-Louis, el huerto del rey reabierto a finales del siglo XX y el Jeu de Paume, ofrecen otros aspectos interesantes de esta extraordinaria ciudad.
   Château de Versailles**. Luis XIII hizo construir una pequeña residencia que transformó en villa en 1631 para no tener que regresar a Saint-Germain-en-Laye mientras estuviera de caza por las tierras de Versailles. La melancolía de Luis XIII, que se escapaba de la Corte para recogerse en su refugio, y el amor de Luis XIV por Louise de la Vallière impulsaron la transformación de Versailles. Durante todo su reinado (72 años) Luis XIV adaptó la villa a la evolución de sus gustos y necesidades: tras cada guerra ganada Versailles se enriquecía y una nueva favorita entraba en la vida del monarca. El Palacio Viejo quedó englobado en la década de 1670, por obra de Le Vau, en lo que se llamaría el Enveloppe (el sobre); en aquella época la favorita era madame de Montespan. El Envelope rodeaba el palacio Viejo formando una U en los tres lados del jardín, mientras en el Patio de Mármol, revestido de mármoles blancos y negros, se conservó la fachada del palacio de Luis XIII.
   En los años 80, Jules Hardouin-Mansart se dio a conocer con el proyecto de la villa de Clagny para Montespan, hasta el punto de convertirse en el "primer arquitecto" del rey (1686); la favorita era entonces madame de Maintenon: Tras la decisión del monarca, en 1682, de trasladar la sede del gobierno de Versailles, la misión de Hardouin-Mansart fue multiplicar los espacios. Hacia el lado del jardín construyó la primera planta, es decir, la galerie des Glaces, el salon de la Guerre y el de la Paix, sobre la galería baja; en los extremos del palacio añadió dos alas simétricas, el Aile du nord y el Aile du midi, con la Cour royale en el centro. En la década de 1690 se construyó la chapelle, que quedó concluida bajo el reinado de Luis XV, quien, al final de su reinado, dio permiso a Gabriel para realizar el Grand Dessein, es decir, la decoración del patio, el ala derecha de la Cour royale y la construcción completa de la Opéra.
   Palacio**. Bustos y estatuas de todas las épocas decoran los atrios y los largos pasillos. La chapelle de Saint-Louis*, una de las obras maestras de Hardouin-Mansart, blanca y dorada, iluminada por grandes ventanas, combina la extrema modernidad con la tradición más venerable. Las altas y esbeltas columnas son una novedad incluida por el arquitecto, mientras que la altura del edificio y la importancia de las ventanas son tomadas del gótico. Desde la tribuna, que se conectaba con los apartamentos, el rey asistía a la misa diaria. Sólo bajaba durante las grandes festividades religiosas. Robert de Cotte, el colaborador más cercano de Hardouin-Mansart, continuó con la decoración prevista cuando murió el arquitecto en 1708.
   En el Musée de l`Histoire de France, Luis Felipe, utilizando el espacio de varios apartamentos, creó la galerie des Batailles y las salas "góticas" (para demostrar que la nación francesa había sido formada por el rey y los ciudadanos), uno de los conjuntos más importantes de pintura del siglo XIX.
   Gabriel, el arquitecto de Luis XV, decidió construirla Opéra*, una sala de forma oval edificada en veintiún meses (1770) para las fiestas del matrimonio del Delfín, el futuro Luis XVI, con María Antonieta de Austria; el interior, muy sugerente, está completamente forrado con madera tallada y dorada sobre un fondo azul y decorado con estatuas de Pajou. En esta sala, cuya acústica es excepcional, se reunió la Asamblea Nacional desde 1871 hasta 1875; se restauración fue terminada en 1957, con ocasión de la solemne recepción ofrecida a Isabel II, reina de Inglaterra.
   Como un juego de cajas chinas, en el Gran Apartamento**, las habitaciones se suceden sin interrupción. Hasta el reinado de Luis XIII esto era un sólo espacio, pero con Luis XIV las reinas entran en Versailles y comienzan las reformas. Ana de Austria, la reina madre, se hizo un apartamento en la planta baja, y María Teresa otro en la primera planta, simétrico al del rey. La distribución de las habitaciones de la reina a la izquierda y las del rey a la derecha se mantuvo hasta la muerte de ésta. Inspirada por Le Brun, la decoración sigue la moda italiana, con el uso de mármoles en las paredes o brocados en lugar de boiseries y tapices, y bóvedas pintadas con escenas mitológicas en vez de los clásicos techos a la francesa. Le Brun creó los dibujos que luego fueron ejecutados por sus alumnos. La manera italiana se impuso también en el salon d'Hercule, realizado por de Cotte durante el reinado de Luis XV. En el salon de la Guerre, de 1678-1680, las pinturas representan el triunfo de Francia sobre Alemania, España y Holanda. En la galerie des Glaces, bajo la bóveda de 75 m, se cuenta la historia de Luis el Grande; los capiteles de este espacio fueron inventados para consagrar un orden puramente francés (con las figuras del gallo, el sol y el lirio, símbolos de la monarquía), junto a los órdenes clásicos. Las pinturas del salon de la Paix se hicieron durante el reinado de Luis XV.
   En el Appartement du roi (Luis XIV) el mármol se sustituyó por boiseries y las bóvedas blancas reemplazaron las pinturas italianas; encima de la chimenea un cuadro ocupó el lugar del espejo. En estos apartamentos nació el arte decorativo francés, que tendrá, a partir del siglo XVIII un impulso excepcional.
   Los jardines**. Los jardines de Versailles, prototipo de los jardines de estilo francés, son una creación genial de Le Nôtre, el cual comenzó a diseñarlos en 1660. El rey manifestaba una gran pasión por ellos y de buena gana acompañaba a los huéspedes a visitarlos, para enseñarles sus innumerables encantos. En un libro escrito por él a los 60 años, Manière de montrer les jardins de Versailles, describía el recorrido que consideraba idóneo. Empezaba en la terraza detrás del palacio, giraba a la izquierda hacia la Orangerie construida por Le Vau, llegaba hasta el basin d'Apollon y regresaba por el otro lado, entre los bosquecillos y fuentes. Hasta el año 1680 el jardín recibió contribuciones de los más grandes escultores: estatuas de bronce y plomo dorado, hermas y esculturas de mármol. Plasmados por Le Brun, Girardon y hasta Bernini, varios temas de la mitología griega pueden verse en el recorrido llamado "del sol desde la aurora hasta el ocaso", es decir, desde el estanque de Apolo al de Latona.
   La disposición de las estatuas es idea de Hardouin-Mansart; a Perrault, en cambio, se le ocurrió colocar 32 fuentes en correspondencia con las 32 fábulas de Esopo. Los arquitectos construyeron grutas y pabellones que aún hoy pueden apreciarse.
   En el Grand Canal (parc de Versailles) navegaban embarcaciones de todo tipo, construidas en Francia y en Venecia, o en una aldea al fondo del canal llamada la Petite Venise, en la que sólo vivían marineros.

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