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martes, 13 de marzo de 2018

2186. BRAGA* (II), capital: 18 de agosto de 2016.

18. BRAGA, capital. Exterior de la capilla de los Coimbras.
19. BRAGA, capital. Interior de la capilla de los Coimbras.
20. BRAGA, capital. Fachada de la igl. de Sta. Cruz.
21. BRAGA, capital. Remate de una de las torres de la igl. de Sta. Cruz.
22. BRAGA, capital. Interior de la igl. de Sta. Cruz.
23. BRAGA, capital. Fachada del Hospital e igl. de San Marcos.
24. BRAGA, capital. Fachada del Seminario.
25. BRAGA, capital. Torre del Homenaje.
26. BRAGA, capital. Fachada de la igl. dos Terceiros.
27. BRAGA, capital. Interior de la igl. dos Terceiros.
28. BRAGA, capital. Crucificado de la igl. dos Terceiros.
29. BRAGA, capital. Decoración de paño de azulejos en la igl. dos Terceiros.
30. BRAGA, capital. Praça da Republica.
31. BRAGA, capital. En la fachada de la igl. dos Congregados.
32. BRAGA, capital. Interior de la igl. dos Congregados.
33. BRAGA, capital. Fachada del museo de Pío XII.
BRAGA* (II), capital del distrito: 18 de agosto de 2016.
   Muy cerca de la Catedral, a menos de 100 m si se continúa por la rua S. J. do Souto, se abre una encantadora placita completamente dominada por el conjunto que forman la capela de São João do Souto, la Capela dos Coimbras y una preciosa mansión adosada que pertenecía a esta misma familia. João Coimbra fue el intendente del obispo Diogo de Sousa y, como tal, hombre de influencia y magra fortuna. La casa señorial tiene un bonito pórtico de entrada y varias ventanas de estilo manuelino, herencia de una construcción anterior. La capilla es también de estilo manuelino y fue obra de los mismos artistas vascos que participaron en la reconstrucción de la catedral. En el vértice del tejado de la torre, una sólida construcción de esquinas adornadas con esculturas, se encuentra instalada la esfera armilar, símbolo del imperio colonial que creó el rey Dom Manuel gracias a las expediciones de Vasco da Gama y a la superioridad naval portuguesa. A destacar el armónico conjunto del porche de entrada, cerrado por una verja de hierro forjado. En el interior hay espléndidos paneles de azulejos* con escenas de Adán y Eva y dos obras de enorme valor: un grupo escultórico* de la Inhumación de Jesús y el retablo* en mármol del altar mayor, una Virgen con el Niño y, otras dos imágenes, una a cada lado de la figura central, que corresponden a los padres de María, Santa Ana y San Joaquín. Ambas obras han sido atribuidas por algunos autores a Jean de Rouen, pero, en cualquier caso, pertenecen indudablemente a la escuela de escultura renacentista de Coimbra. Por lo que se refiere a la capela de São João do Souto, es un oratorio mucho más modesto, reconstruido en los siglos XVIII y XIX.
   Cerca de la casa y la capilla de los Coimbras*, nada más rebasar la angosta rua do Anjo y a la entrada del largo Carlos Amarante, se alza una nueva iglesia, la de Santa Cruz, de fachada manierista y decoración interior a base de talla dorada y azulejos. Hace ángulo con ella, componiendo un conjunto urbano barroco que no desmerecería en Roma, el Hospital e iglesia de S. Marcos (Carlos Amarante), con fachada convexa coronada con las estatuas de apóstoles y mártires; en el interior se halla el mausoleo de D. Diogo de Sousa. Más allá, a punto de ingresar de nuevo en la ciudad moderna, está la casa do Raio (siglo XVIII), también llamada Casa del Mejicano, por ese aire "indiano" que transmite su fachada de estilo rocalla y adornada con azulejos.
   Pero el catálogo monumental de esta parte de la ciudad delimitada por la rua Diogo de Sousa está lejos de agotarse con lo ya descrito, no en vano Braga ha sido durante siglos el centro espiritual del país y dispone de al menos media docena más de templos destacables, aunque de menor importancia artística que los anteriores. Entre ellos la iglesia de São Miguel, la de Oliveira, la de São Sebastião, la de São Pedro y la del monasterio de las Dominicas. También en esta mitad del casco antiguo, si bien más desplazada hacia el centro, se encuentra la iglesia de Nossa Senhora da Penha de França, cuyos muros interiores están bellamente decorados con azulejos de Policarpo Oliveira Bernardes.
   Al otro lado de la frontera ficticia que forma la rua Diogo de Sousa se encuentra el convento de Santa Clara, la iglesia de São Francisco, la iglesia do Carmo y la iglesia de Nossa Senhora do Pópulo*, obra del arquitecto bracarense Carlos Amarante, autor también del celebre santuario de Bom Jesus do Monte. Y entre los edificios civiles, el Palacio de los Biscainhos. Esta mansión, conocida con tan curioso nombre por haber sido obra de los artistas vascos que atrajo a Braga el obispo Diogo de Sousa, se ha habilitado como sede un museo dedicado a recordar, a través de sus dependencias y jardines, el estilo de vida propio de las familias nobles de los siglos XVII y XVIII. En él se exponen restos arqueológicos de la época romana, piezas de cerámica portuguesa y holandesa, orfebrería religiosa, mobiliario de época, joyas, porcelanas y otros objetos de arte.
   Braga, que en el pasado fue ciudad amurallada, no conserva otro vestigio de sus antiguas líneas defensivas que una vetusta torre del homenaje que se yergue sobre la avenida Central, justo detrás de la iglesia Dos Terceiros y muy cerca de la Oficina de Turismo, y en el extremo contrario de la rua do Souto la torre da Porta Nova (arco del siglo XVIII), que acoge el museu da Imagem.
   Otros museos de Braga son el de Pío XII, sito en el evocador lardo de São Paulo y que incorpora las ruinas de una villa romana; el Nogueira da Silva, en la avda. Central, con el legado de este coleccionista y filántropo; y el Regional de Arqueología D. Diogo de Sousa, sito en la avda. da Inmaculada.
   En otro orden de cosas, son justamente famosas las fiestas que se celebran todos los años en honor de San Juan Bautista y que alcanzan sus apoteosis en el solsticio de verano, la noche de San Juan, entre el 23 y el 24 de junio. Sin embargo, las celebraciones más impresionantes tienen lugar durante la Semana Santa, cita solemne que atrae a visitantes de todos los rincones de Portugal.

Textos de:
SERRA, Rafael y HITA, Carlos de. Guía Total: Portugal de punta a punta. Anaya. Madrid, 2004.

Enlace a la Entrada anterior de Braga*:

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