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| 9. ESTEPA, Sevilla. Cúpula de la igl. de Ntra. Sra. de la Asunción. |
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| 10. ESTEPA, Sevilla, Vista general del interior de la igl. de Ntra. Sra. de la Asunción. |
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| 11. ESTEPA, Sevilla. Retablo mayor y cúpula de la igl. de Ntra. Sra. de la Asunción. |
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| 12. ESTEPA, Sevilla. Púlpito de la igl. de Ntra. Sra. de la Asunción. |
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| 13. ESTEPA, Sevilla. San Pedro, en la igl. de Ntra. Sra. de la Asunción. |
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| 14. ESTEPA, Sevilla. Ntra. Sra. del Rosario, en la sacristía de la igl. de Ntra. Sra. de la Asunción. |
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| 15. ESTEPA, Sevilla. El Sto. Xto. de las Penas, en la igl. de Ntra. Sra. de la Asunción. |
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| 16. ESTEPA, Sevilla. Detalle de la impresionante espalda del Sto. Xto. de las Penas, en la igl. de la Asunción. |
ESTEPA (II), provincia de Sevilla: 28 de febrero de 2005.
En la calle Castillejos se localiza la iglesia de la Asunción, edificio de una sola nave a la que añade el núcleo de la sacristía, escalera y camarín en la cabecera y dos capillas en el lado izquierdo. La nave se cubre mediante bóveda de cañón con lunetos apareciendo una media naranja en el presbiterio. El camarín es de planta hexagonal, se cubre con bóveda semiesférica de seis paños y es obra de Francisco López, quien la realizó en 1716, dorándose en 1749. En la fachada destaca la portada de piedra con balcón en el segundo cuerpo, fechable en la primera mitad del siglo XVIII. Se tienen noticias de que la iglesia se construía entre 1646 y 1652, aunque el conjunto del camarín y las labores decorativas datan del siglo XVIII.
El retablo mayor se compone de banco y un cuerpo de tres calles separadas por estípites, siendo datable hacia 1745. En su camarín se sitúa la imagen de candelero de la Virgen de la Concepción, ocupando las calles laterales esculturas de San José y San Joaquín, San Roque y Santa Ana. En el ático figura un relieve de la Asunción. La capilla abierta en el lado izquierdo cuenta con un pequeño retablo dedicado a San Pedro, que puede datarse hacia 1760. Se trata de una obra relacionable con los talleres antequeranos y especialmente con las obras de la familia Primo. En la nave existe un púlpito de jaspes con medallones de relieve.
Uno de los aspectos que ofrecen mayor interés de este templo es el singular conjunto de pinturas decorativas que adorna su interior, reflejando un amplio programa iconográfico, obra de Manuel Jodar y Romero en 1754. En el camarín, decoran los seis paños de la media naranja escenas con ángeles músicos; en las pechinas y sobre los paramentos laterales aparecen escenas con la vida de la Virgen y un Apostolado. La bóveda del presbiterio posee una original compartimentación en óvalos gracias a las yeserías, similares a los escudos que decoran las pechinas. En estos óvalos se representan Padres de la Iglesia, santos fundadores, eremitas, confesores, doctores, santas vírgenes y arcángeles, y tal vez sean las más antiguas del conjunto de pinturas de la iglesia. En los medios puntos del presbiterio se sitúan escenas de la vida de Jesús y de María.
La compartimentación en tramos de la bóveda de la nave se prolonga en los muros laterales hasta la altura del zócalo mediante un esquema que se repite a lo largo de la misma. Los arcos fajones y los lunetos se decoran con pinturas de ángeles y hojarasca, según el estilo de la primera mitad del siglo XVIII, mientras que el registro central presenta un óvalo de lienzo rodeado de cuatro más pequeños. Los muros laterales y los medios puntos determinados por los lunetos responden a un esquema análogo. En la bóveda aparecen, del presbiterio a los pies, San José, San Francisco de Asís, San Francisco de Paula y un arcángel. En el muro izquierdo San Jerónimo, la Dormición de la Virgen, San Pablo ermitaño, la Virgen del Rosario entre Santo Domingo y Santa Catalina, San Guillermo, la Inmaculada y San Juan Bautista. En el lado derecho San Antonio Abad, Jesús entre los Doctores, San Onofre, la Piedad, un santo anacoreta, la Coronación de la Virgen y otro santo, en el coro. Todos ellos aparecen rodeados con pinturas de menor tamaño representando santos, escenas de la vida de la Virgen y de Cristo, ángeles y apóstoles.
El tesoro de la Virgen de la Asunción contiene una serie de piezas de oro, diamantes y esmeraldas de finales del siglo XVII y de la primera mitad del XVIII, consistentes en pendientes, anillos, grandes pectorales y otras piezas menores.
El retablo mayor se compone de banco y un cuerpo de tres calles separadas por estípites, siendo datable hacia 1745. En su camarín se sitúa la imagen de candelero de la Virgen de la Concepción, ocupando las calles laterales esculturas de San José y San Joaquín, San Roque y Santa Ana. En el ático figura un relieve de la Asunción. La capilla abierta en el lado izquierdo cuenta con un pequeño retablo dedicado a San Pedro, que puede datarse hacia 1760. Se trata de una obra relacionable con los talleres antequeranos y especialmente con las obras de la familia Primo. En la nave existe un púlpito de jaspes con medallones de relieve.
Uno de los aspectos que ofrecen mayor interés de este templo es el singular conjunto de pinturas decorativas que adorna su interior, reflejando un amplio programa iconográfico, obra de Manuel Jodar y Romero en 1754. En el camarín, decoran los seis paños de la media naranja escenas con ángeles músicos; en las pechinas y sobre los paramentos laterales aparecen escenas con la vida de la Virgen y un Apostolado. La bóveda del presbiterio posee una original compartimentación en óvalos gracias a las yeserías, similares a los escudos que decoran las pechinas. En estos óvalos se representan Padres de la Iglesia, santos fundadores, eremitas, confesores, doctores, santas vírgenes y arcángeles, y tal vez sean las más antiguas del conjunto de pinturas de la iglesia. En los medios puntos del presbiterio se sitúan escenas de la vida de Jesús y de María.
La compartimentación en tramos de la bóveda de la nave se prolonga en los muros laterales hasta la altura del zócalo mediante un esquema que se repite a lo largo de la misma. Los arcos fajones y los lunetos se decoran con pinturas de ángeles y hojarasca, según el estilo de la primera mitad del siglo XVIII, mientras que el registro central presenta un óvalo de lienzo rodeado de cuatro más pequeños. Los muros laterales y los medios puntos determinados por los lunetos responden a un esquema análogo. En la bóveda aparecen, del presbiterio a los pies, San José, San Francisco de Asís, San Francisco de Paula y un arcángel. En el muro izquierdo San Jerónimo, la Dormición de la Virgen, San Pablo ermitaño, la Virgen del Rosario entre Santo Domingo y Santa Catalina, San Guillermo, la Inmaculada y San Juan Bautista. En el lado derecho San Antonio Abad, Jesús entre los Doctores, San Onofre, la Piedad, un santo anacoreta, la Coronación de la Virgen y otro santo, en el coro. Todos ellos aparecen rodeados con pinturas de menor tamaño representando santos, escenas de la vida de la Virgen y de Cristo, ángeles y apóstoles.
El tesoro de la Virgen de la Asunción contiene una serie de piezas de oro, diamantes y esmeraldas de finales del siglo XVII y de la primera mitad del XVIII, consistentes en pendientes, anillos, grandes pectorales y otras piezas menores.
Textos de:
ARJONA, Rafael. Guía Total: Andalucía. Ed. Anaya. Madrid, 2005.
ARJONA, Rafael y WALLS, Lola. Guía Total: Sevilla. Ed. Anaya. Madrid. 2007.
MORALES, Alfredo J.; SANZ, María Jesús; SERRERA, Juan Miguel y VALDIVIESO, Enrique. Guía artística de Sevilla y su provincia II. Fundación José Manuel Lara y Diputación Provincial de Sevilla. Sevilla, 2004.
ARJONA, Rafael y WALLS, Lola. Guía Total: Sevilla. Ed. Anaya. Madrid. 2007.
MORALES, Alfredo J.; SANZ, María Jesús; SERRERA, Juan Miguel y VALDIVIESO, Enrique. Guía artística de Sevilla y su provincia II. Fundación José Manuel Lara y Diputación Provincial de Sevilla. Sevilla, 2004.
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