4013. ROMA** (XLVI), capital: 11 de septiembre de 2023

ROMA** (XLVI), capital de la provincia, de la región, y de Italia: 11 de septiembre de 2023.

Farnesina ai Baullari*. El palacio, entre los más bellos ejemplos de arquitectura de comienzos del siglo XVI, probablemente obra de Antonio da San­ gallo el Joven en colaboración con Baldasarre Peruzzi, se construyó en 1523 para el prelado bretón Thomas Le Roy (latinizado como De Regis). Las flores de lis que adornan su escudo -que aparecen junto al armiño, símbolo de Bre­taña- se confundieron con los de los Farnese, un error que explica su nombre actual. El palazzetto, trasladado para abrir paso a corso Vittorio, y rehabilitado por el arquitecto Guj, presenta una fachada del siglo XVI que da al cercano callejón dell'Aquila. Desde 1948 alberga el Museo Barracco.

Palazzo Braschi. En el corazón de la Roma del Renacimiento, enclavado entre corso Vittorio Emanuele II y Pia­zza Navona, Pío VI encargó a Cosimo Morelli su residencia familiar. En 1798 la construcción quedó interrumpida por la irrupción de las tropas francesas, y se terminó en 1802 bajo la dirección de Giuseppe Valadier. Si la intervención de este último es reconocible en la capilla, a Morelli se deben la planta, inspirada en el clasicismo del siglo XVI y la espectacular escalinata posteriormente terminada por Valadier. Destinado a sede mi­nisterial desde el mismo día siguiente a la unidad italiana (durante la época fascista, aquí se reunía la Federación fascista), desde 1952 es sede del Museo de Roma.

Palazzo Massimo alle Colonne*. Corso Vittorio Emanuele II, 141. Solo situándose en la esquina con via del Paradiso, se logra captar el efecto de cla­roscuro de la columnata del edificio que Baldassarre Peruzzi ideó para su última obra arquitectónica, que conserva la convexidad del odeón de Domiciano (siglo I) que está debajo, conectado con el estadio homónimo del que surgió la cercana Piazza Navona. En el palacio, al que se accede a través de una puerta* con rico entablamiento sobre ménsulas, aún viven los descendientes de la familia, cuya presencia en la ciudad está documentada desde finales del siglo X, y cuyo fundador parece que fue Quinto Fabio Massimo el Contemporizador, a quien Daniele de Volterra homenajeó en el friso del salón de entrada.

     El palacio se puede visitar solo el 16 de marzo, de 7 h a 13 h, con ocasión de la conmemoración del milagro por el que san Felipe Neri resucitó al joven Paolo Massimo que, tras confesarse, pudo morir en paz: tuvo lugar en 1583 y, desde entonces, cada año se celebra una misa en la habitación del mucha­cho, ahora transformada en capilla.

     El palazzo Massimo 'Istoriato'*, el más antiguo de la manzana que da a la Piazza de'Massimi que hay detrás, acogió la primera imprenta de Roma (1467); las pinturas de la fachada, atribuidas a la escuela de Daniele da Volterra, dan una idea de cómo debió de ser el aspecto de muchos edificios de Roma en el Renacimiento. En la denominada 'manzana de los Massimo' se encuentra también la iglesia de San Pantaleón, mencionada ya en el siglo XII, pero vuelta a edificar a finales del siglo XVII según el diseño de Giovanni Antonio de Rossi, que da hacia corso Vittorio la fachada decimonónica de Giuseppe Valadier.

San Andrea della Valle*. Piazza Vidoni, 6 (visita de 7.30 h al 2.30 h y de 16.30 h a 19.30 h). Solo San Pedro posee una cúpula más alta que esta concebida en 1622 por Cado Maderno, llamado en 1608 para terminar la iglesia comenzada en 1591 a partir de planos de Pietro Paolo Olivieri. Semejante a la iglesia del Gesù, pero más evolucionada, como atestiguan los cuatro nichos que 'agujerean' la fachada en travertino ideada por Maderno (realizada por Cado Reinaldi y Carlo Fontana, 1656-1665); estos albergan las estatuas de san Andrés apóstol y de san Andrés Avelino (firmados por Ercole Ferrata), y de san Cayetano y san Sebastián (esculpidas por Domenico Guidi). El lujoso interior, lleno de luz de Olivieri, se mantiene fiel al clásico esquema de cruz latina. Los frescos de la cúpula y del ábside fueron objeto de una verdadera contienda artística: pintados por dos grandes rivales, Giovanni Lanfranco, la Gloria del Paraíso (1625- 1628) que hay en la cúpula es suya, y Do­menichino, autor de los evangelistas de las pechinas de la misma; las escenas de la vida de san Andrés*, las Virtudes y los dos desnudos en el intradós y el ábside, constituyen uno de los mejores ejemplos romanos de decoración barroca, junto a las telas de Mattia Preti en la curva del ábside. La 1ª capilla izquierda (Barberini) se abrió en el lugar donde, según la tradición, se encontró el cuerpo de san Sebastián.

     Fuera, sobre el lado izquierdo de la iglesia, se apoya otra de las 'estatuas parlantes' de Roma, conocida como el abate Luigi. No lejos, en la calle de la que toma su nombre, está el Teatro Valle, del siglo XVIII, pero reestructurado en 1821 por Giuseppe Valadier, escenario donde han representado las mejores compa­ñías italianas (VV.AA. Guía total: Roma y el Vaticano. Anaya. Madrid, 2020).

     

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