1. BILBAO, capital. El museo Guggenheim.
2. BILBAO, capital. "Puppy" en el exterior del museo Guggenheim.
3. BILBAO, capital. Acceso al museo Guggenheim.
4. BILBAO, capital. Otra vista del museo Guggenheim con el puente de la Salve a la derecha.
5. BILBAO, capital. Otra visión del museo Guggenheim.
6. BILBAO, capital. Una última vista del espectacular edifico del museo Guggenheim.
7. BILBAO, capital. El terrier "puppy" y al fondo la Torre Iberdrola.
8. BILBAO, capital. Otra vista de la Torre Iberdrola.
9. BILBAO, capital. Fachada del museo de Bellas Artes.
BILBAO** (I), capital de la provincia: 10 de agosto de 2010.
Edificado en el fondo del valle que forman los ríos Nervión e Ibaizabal, que a partir de aquí toman el nombre de ría de Bilbao, el botxo (hoyo, agujero en euskera), como cariñosamente le llaman los bilbaínos, nació ya en la Edad Media con vocación comercial, industrial y marinera y se convirtió, con el tiempo, en motor de la economía del País Vasco. En estos momentos, Bilbao es una ciudad luminosa, trepidante y moderna, a pesar de los embates que ha sufrido en la última década contras su industria tradicional. También es uno de los principales centros financieros españoles, puerto importantísimo, ciudad de ferias internacionales y foco de cultura con sus universidades de Deusto y del País Vasco y sus muchas instituciones públicas y privadas.
Bajo el puente de la Salve, se levanta el impresionante edificio del Museo Guggenheim**, fruto del acuerdo suscrito entre el Gobierno Vasco y la Fundación Solomon R. Guggenheim. el innovador edificio, diseñado por Frank O. Gehry, consiste en una serie de bloques interconectados, recubiertos de piedra y titanio, que evocan la forma de un buque varado en la ría. Entre las valiosas obras de arte contemporáneo y moderno que alberga, unas 300 obras representativas del siglo XX, destacan el gigantesco terrier de flores "Puppy" de Jeff Koons que adorna la entrada exterior, o, ya en el interior, la galería Fish, auténtica cueva del arte donde se sitúan obras como la serpiente de Richard Serra, el laberinto de Richard Morris o la navaja articulada de Oldenbert. Visitar el Guggenheim es realizar un recorrido por el arte más innovador en todas sus tendencias: diferentes vanguardias americanas y europeas (minimal, por y arte conceptual); frente a cubistas, surrealistas y expresionistas.
Por la avenida de Mazarredo nos encaminamos a la Plaza de Euskadi donde encontramos la Torre Iberdrola, diseño del arquitecto argentino Cesar Pelli, de 165 m de altura y que constituye el último gran hito en el proceso de transformación de la ciudad de Bilbao y el eje central del nuevo centro financiero.
Muy cercano, en un extremo del parque de doña Casilda de Iturriza, se alza el Museo de Bellas Artes**, cuya modesta fachada esconde uno de los mejores museos españoles: tiene 31 salas en la que muestra colecciones de las escuelas renacentistas holandesa, flamenca e italiana. Además posee una amplia representación de los principales pintores vascos y del arte internacional del siglo XX. Un recorrido por las diferentes salas permite disfrutar de una amplia visión de la pintura vasca, española y europea. La evolución de la pintura española se puede seguir desde las primeras manifestaciones bajomedievales hasta las últimas tendencias vanguardistas. Entre los pintores representados cabe destacar a Jaime Huguet, El Greco, Valdés Leal, Francisco de Zurbarán, Ribera, Luis Paret, Goya o Cecilio Pla, en la sección de arte antiguo; y entre los representantes de este siglo destacan Picasso, Nonell, Solana, Vázquez Díaz, Antoni Tàpies ... Igualmente destacable es la sección de arte vasco, con obras de Aurelio Arteta, Iturrino, Zuloaga, Oteiza, Chillida ... Por lo que respecta a las escuelas europeas (italiana, flamenco-holandesa, francesa) se hallan representadas en las etapas renacentista y barroca (Jan Gossaert, Van Dyck, Giulio Romano ...). Asimismo, el museo acoge obras pertenecientes a los movimientos vanguardistas contemporáneos de Gauguin, Delaunay, Lèger, Kokoscka, Bacon ...
Bajo el puente de la Salve, se levanta el impresionante edificio del Museo Guggenheim**, fruto del acuerdo suscrito entre el Gobierno Vasco y la Fundación Solomon R. Guggenheim. el innovador edificio, diseñado por Frank O. Gehry, consiste en una serie de bloques interconectados, recubiertos de piedra y titanio, que evocan la forma de un buque varado en la ría. Entre las valiosas obras de arte contemporáneo y moderno que alberga, unas 300 obras representativas del siglo XX, destacan el gigantesco terrier de flores "Puppy" de Jeff Koons que adorna la entrada exterior, o, ya en el interior, la galería Fish, auténtica cueva del arte donde se sitúan obras como la serpiente de Richard Serra, el laberinto de Richard Morris o la navaja articulada de Oldenbert. Visitar el Guggenheim es realizar un recorrido por el arte más innovador en todas sus tendencias: diferentes vanguardias americanas y europeas (minimal, por y arte conceptual); frente a cubistas, surrealistas y expresionistas.
Por la avenida de Mazarredo nos encaminamos a la Plaza de Euskadi donde encontramos la Torre Iberdrola, diseño del arquitecto argentino Cesar Pelli, de 165 m de altura y que constituye el último gran hito en el proceso de transformación de la ciudad de Bilbao y el eje central del nuevo centro financiero.
Muy cercano, en un extremo del parque de doña Casilda de Iturriza, se alza el Museo de Bellas Artes**, cuya modesta fachada esconde uno de los mejores museos españoles: tiene 31 salas en la que muestra colecciones de las escuelas renacentistas holandesa, flamenca e italiana. Además posee una amplia representación de los principales pintores vascos y del arte internacional del siglo XX. Un recorrido por las diferentes salas permite disfrutar de una amplia visión de la pintura vasca, española y europea. La evolución de la pintura española se puede seguir desde las primeras manifestaciones bajomedievales hasta las últimas tendencias vanguardistas. Entre los pintores representados cabe destacar a Jaime Huguet, El Greco, Valdés Leal, Francisco de Zurbarán, Ribera, Luis Paret, Goya o Cecilio Pla, en la sección de arte antiguo; y entre los representantes de este siglo destacan Picasso, Nonell, Solana, Vázquez Díaz, Antoni Tàpies ... Igualmente destacable es la sección de arte vasco, con obras de Aurelio Arteta, Iturrino, Zuloaga, Oteiza, Chillida ... Por lo que respecta a las escuelas europeas (italiana, flamenco-holandesa, francesa) se hallan representadas en las etapas renacentista y barroca (Jan Gossaert, Van Dyck, Giulio Romano ...). Asimismo, el museo acoge obras pertenecientes a los movimientos vanguardistas contemporáneos de Gauguin, Delaunay, Lèger, Kokoscka, Bacon ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario